SOPA DE CEBOLLA EXPRESS

Antes que nada agradecer mil millones de veces el reconocimiento que me dais , esta vez con un premio precioso que me ha dado Lunarillos, la dueña del blog que me tiene enamorada sopa de cocodrilo, que no tengo tiempo para hacer todas las maravillas que enseña, que me tiene loca con sus fotos y que me ha emocionado que me de este premio, se lo vuelvo a mandar a ella!!

Premio amigas blogeras, que bonito pensar que nos une la cocina a personas tan lejanas y distintas...

Y aunque me alegrado el dia, el resto es de color marron con moscas, porque hoy me duele horrores la cabeza, no un poquillo ni un malestar, horrores.
Es como si en mi cabeza estuviese Madrid con todas sus obras a pleno rendimiento; cierro los ojos y hasta me viene el olorcillo de los callos con chorizo, si sigo así terminaré bailando un chotis.
Y tengo un examen casi tan horroroso como mi dolor de cabeza dentro de tres semanas y estoy megaagobiada. -Alaaaaaaaaaaaaaaaa, exageraadaaaaaaaaaaaa , pero si te sobra tiempo - direis algunos, - y un cojón, un cojón también me sobra- digo yo, porque …en medio de esas tres semanas de trabajo incansable están….LAS FIESTAS DE MOROS Y CRISTIANOS DE INTERES TURISTICO INTERNACIONAL!!! Visca Sant Jordiii!!! Visca!!! ( viva san jorgeee, viva, no se me ofendan los castellanoparlantes, paz y concordia).

Porque no está nada mal sacar a relucir de tanto en tanto la alcoiania feroz y el patriotismo local, que oye, el resto de la ciudad, en política, trabajo, educación, medioambiente y demás competencias de este nuestro ayuntamiento, es una mierda, pero las fiestas son las mejores del mundo, y chitón al que me lleve la contraria!!!.
Como realmente merecen una entrada aparte ( la de cristianos mañanera y la de moros por la tarde , jojojo, que horror de chiste mas a huevos) ya os disertaré largo y tendido sobre ese misterio ensalzador de egos masculinos que es nuestra bienamada trilogía festera.
Por ahora solo lloriquearos un poco, pues aunque soy afortunada en muchas cosas hoy me siento fatal.
Algunos dirán que doblemente afortunada, jeje ;b

En vez de avanzar hacia la madurez retrocedo a la adolescencia con un acné furibundo, porque las arrugas se quitan con botox, pero los granos no hay dios que los elimine, y yo quiero ser Cher. Además tengo el pelo susiooo, unas pelusas vellosas que minan mi feminidad, de uniforme oficial para estudiar el pijama con bolillas, y afortunadamente me saco los camales de los calcetines al levantarme de la cama porque si no solo me faltaría el cartón de vino peleón y bajarme a la escalerilla .

Y por si fuera poco, la turmix me odia. Merengue que hago merengue que me escupe, y no sobre el delantal no, sobre la pila de cacharros recién fregados ; puré de verduras que me trituro, aceite que me reglota; almendras que pico tropezón que me deja….buaaaaa..que asco de diaaa.
Asi que en este contexto de dejadez suma ( con unas toneladas de eyeliner corrido pareceré prima hermana de ser Amy Winehouse) algo sencillo y rápido de cocinar, a la par de sabroso.

Ingredientes (para tres personas)
1 sobre de sopa de cebolla
Tres cebollas
Aceite
Pan duro
Queso del que se funde y haces el cochino que da gloria.

Raspidamente lo hacemos:

Cortamos las cebollas a tiras, que quede en plan filamento al pocharse, y las echamos a un perol bien grande con aceite de oliva ( aqui entra lo grasoso que se quiera sentir uno).

Y ala, a que se pochen bien pochas hasta que estén blancas blanditas o pidan clemencia.
Ahora poner agua, como vaso y medio por persona, o mas, depende del hambre, y el sobre de sopa ( el contenido, el sobre no, que indigesta un poco!), remover, remover , remover y dejar cocer unos 10 minuto.
Por otro lado cortar rebanaditas de pan, ponerle el queso encima y a gratinar unos pocos minutos.

Yo use unos quesos un poco verdosillos ya, que les quité la parte colorista, que hay qeu aprovechar la comida!!!

Con cuidado poner el pan en el fondo del plato (ojo con el queso porque si lo tocas es como el loctite, pero además quema de lo lindo) y tirarle la sopa por encima. Yo para rematar el día y en un ataque de envidia al plato y torpeza suma , me he tirado la sopa por encima, con la consiguiente sofrimada; y no me ha quedado otra que cambiarme mi pantalón bolillero, ahora que nos habíamos hecho tan amigos.

Fácil, rápido, barato y muy rico.